domingo, marzo 12, 2006

MANOS DE MANTEQUILLA


El Barça no ha perdido por las manos de mantequilla de Víctor Valdés. Tampoco ha caído en el Estadio Reyno de Navarra porque el árbitro haya expuslado a Motta. No ha perdido por un despropósito sino porque la sucesión de despropósitos ha sido espectacular.

Eso sí, la dirección deportiva del Barcelona tiene que plantearse seriamente qué hace con la portería. Víctor Valdés ha cometido en menos de un mes tres errores de bulto, tres pifias que no pueden estar en el debe de un portero de su categoría.

Tras Ruud Hesp no ha habido ningún hombre de garantías bajo los palos en el Camp Nou. Ni Pepe Reina, que ahora triunfa en el Liverpool, tuvo la confianza que merecía. Ahora el Barcelona tiene un problema y, a final de temporada, con calma, sin prisa, pero sin pausa, deberá fichar a un portero en condiciones... y con un carácter más modesto.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Hace un mes decía que Valdés era un gran portero.

yinyang mason dijo...

Sí, pero después de una pifia aislada, no de 500.