sábado, marzo 04, 2006

EL FÚTBOL ES DE LOS MILLONARIOS


Fernando Martín dice que no quiere un club de millonarios, sino de deportistas. Como frase no está mal, como política deportiva supondría dar la vuelta a todo lo que se ha hecho en el Real Madrid últimamente. Dicho de otra forma, el socio o el aficionado de la calle se puede sentir muy feliz por la frase, pero sabe que la demagogia no va a ningún lado. Luego te encuentras lo que dice Roberto Carlos: “Jugamos en el mejor club del mundo, jugadores que tienen mucha imagen, que venden muchísimo, la gente que piense lo que quiera, yo creo que gano lo que valgo”. Ya, pero si eres mejor tienes que demostrarlo.

En el fútbol del siglo XXI, si no hay millonarios no hay negocio y si no hay negocio no hay espectáculo. Y el fútbl vive del espectáculo, del 'pan y circo', del público que compra entradas, abonos a un canal de pago, camisetas y 'merchandising' vario. Otra historia es que a los millonarios les permitas ciertos privilegios desde el principio que luego es muy difícil de extirpar. Si no pones unas normas desde el principio, luego es muy difícil enderezar el rumbo. Por eso, en el Madrid va a haber hasta diez bajas a final de esta temporada.

Más cosas. Me quedo con la interesante reflexión de Gaspar Rosety sobre la junta directiva blanca celebrada ayer y sobre la ausencia de Ronaldo de la lista de convocados de cara al derbi contra el Atlético de Madrid.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Aprovecho tu reflexión para expresar mi opinión sobre el amigo Martín.
Muy bueno el reportaje de Gallego en la Ser usando los sonidos del No-Do para contextualizar la primera rueda de prensa del nuevo presidente. Ha llegado a nuestras vidas con un populismo barato y una palabrería que a mi me hacen desconfiar sobre manera. Suelo fiarme poco de los charlatanes y Fernando Martín parece uno de ellos.
Me da unas vibraciones horribles, que de momento son sólamente eso, vibraciones.
Un millonario que habla así de otros millonarios...
Puedo equivocarme, pero el nuevo va a ser el "mamporrero" del anterior,Florentino es demasiado "señorial" como para llenarse de barro, o eso se cree él.