El Barcelona tiene por delante los dos meses de fútbol más importantes de su historia. Se juega al mismo tiempo ganar tres competiciones: Liga, Copa y Champions. Analicemos. El equipo recibe al Sevilla y se va a Valencia para el próximo fin de semana, dos jornadas de Liga de una tacada. Y entre el 28 y el 5, el gran 'show' de la Champions y la Liga. Barça-Chelsea, Madrid-Barça, Chelsea-Barça.
Y luego quedan cuatro jornadas más de Liga, y la final de Copa en Valencia contra el Athletic Club y la posible (o no) final de la Champions el 27 de mayo en Roma. Creo que a estas alturas no podemos desconfiar de la profesionalidad de este equipo. Este es el momento de la temporada y toda la preparación física previa se ve reflejada aquí. La resistencia en los últimos metros sólo viene de un atleta, no de un indisciplinado o un díscolo.
Ganen o no ganen los tres títulos, los de Guardiola no van a defraudar. Y con todo van a tener en el cogote el aliento de un Real Madrid que ha perdido demasiado el tiempo en los toros y en los 'boliches', como diría un argentino. El Madrid enlaza rachas espectaculares pero sabiendo que ha perdido mucho tiempo y que ahora ya no puede hacer nada. La frontera es el derbi del Bernabéu del puente de mayo. Es la llave del calendario.
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