La frase la acabo de escuchar en una serie de televisión. Hay veces que la vida no nos da muchas cartas con las que jugar, o directamente nos las da malas, pero debemos saber jugar con ellas. Yo mismo acabo de recibir la llamada de una mujer ecuatoriana que vive en España y cuyo padre se está muriendo más allá del mar. Es una historia triste. Es la historia de una mujer que pidió ayuda cuando su padre estaba mejor y que no la ha recibido... y ahora no hay nada que hacer.
Veo su casa y me miro a mi, y la comparación es insultante. Y odio que las posibilidades sean escasas, que a veces no hagas más que darle vueltas a la cabeza... A veces la vida es complicada y nosotros queremos complicarla un poco más. Especulamos con lo que puede ser y no puede ser, con lo que pensarán los demás o dejarán de pensar, con cómo actuarán, cuando en teoría no te importa. Puta vida y putas circunstancias. Vivamos con ellas...
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