Quedan diez partidos para que el Barça sea oficialmente campeón de Liga. Quizá sea una afirmación muy radical, de euforia y exaltación culé. Pero si miras el calendario, analizas los partidos que juegan unos y otros, el estado de forma de las plantillas, y la estabilidad institucional y deportiva de las dos entidades... no hay color. Bueno, hay colores: azul y grana, en concreto.
Si partimos de la filosofía de los más grandes pensadores, lo más importante es el camino. Pero si hablamos de fútbol, lo más importante no es el camino sino el resultado final, y el Barcelona podría conseguir este año un triplete casi imposible con el nivel del fútbol actual. El Barça es el mejor equipo del mundo y lo demuestra cada semana. Los blaugrana a veces se equivocan, dejan huecos atrás, Víctor Valdés no pasa de ser un portero correcto, les cuesta abrir la lata, pero a partir de ahí...
¿Y el camino? A partir del mes de abril. En la quincena del 7 al 15, comienza el reto de la Copa de Europa. Un mes después, otro título en disputa que es la Copa del Rey. Pero la fecha clave es el 2 o el 3 de mayo con el derbi en el Bernabéu. En Madrid, a nivel institucional y deportivo sólo se piensa en ese partido, como si les fuera la vida en ello. Ahora, desde el madridismo, hay mucho silencio de cara afuera pero muchos movimientos hacia adentro. Por el camino que les queda y por el final triunfal o catastrófico. Ya se sabe. Quien ríe el último...
No hay comentarios:
Publicar un comentario