Cuando alguien habla o gesticula mucho, desconfío. Más de uno me dirá que es justamente lo que yo hago. ¡Bingo! Eso es justamente lo que estoy tratando de evitar (¡anónimos, escribid, que os lo estoy poniendo en bandeja!). Precisamente por eso valoro cada día más el valor del silencio. Dejar que los demás hablen no es solamente respetar a los demás, sino no hacer aprecio al que te desprecia.
Me despierta más confianza el más silencioso que el más hablador, porque sé que lo que te diga el silencioso será de corazón y el charlatán te ofrecerá expectativas que nunca se cumplirán. El silencio no es solamente un buen valor humano, sino una necesidad en una sociedad con cada vez más ruido. Silencio, por favor.
7 comentarios:
Bueno, es muy relativo lo de la confianza. El más silencioso por hablar poco, no es más buena persona ni de más confianza. Puede que lo poco que hable sea para hacer daño. Y mejor uno que hable mucho pero sin dañar, que poco y dañino.
Yo hablo mucho, pero escucho siempre. Nunca hablo sin escuchar y cuando me interrumpen, salvo excepciones, si veo que me va a decir algo importante acepto la interrupción.
Una vez me pregunté, Javier, si el hablar mucho es un gaje del oficio. El periodista siempre está hablando o esa es mi impresión. Conozco sólo a un periodista, y mira que conozco bastantes, que es una persona callada y reservada. ¿Crees que es deformación profesional?
Un saludo amigo.
PD: he escrito un artículo sobre el uso de la lengua en Cataluña, me gustaría que dejaras tu opinión cuando tengas un momento. Por Madrid ya me acusan de todo, de radical catalanista (¿yo?) por defender algo que creo que es lógico y justo para el pueblo. No sé, a los "patriotas" y los acérrimos del castellano y anticatalanistas, leen u oyen algo relacionado con el uso del catalán o el menos uso del castellano y te tachan de todo.
El silencio no tiene valor en sí mismo; unicamente tiene valor cuando nos servimos de él para escuchar a los demás.Con mucho ruido no escuchamos; con mucho silencio tampoco.Saber mantener un buen diálogo es todo un arte; se trata ante todo de olvidarnos del "yo,mi,me,conmigo" para no chillar, y de no "cabrearnos" con las diferncias de los demás. Reivindico el vervo "escuchar",y prefiero la palabra al silencio.
Soy el anónimo anterior. Quiero rectificar el "vervo" que se me ha escapado en la última linea por el "VERBO" que debí haber escrito.Tambien valoro el saber rectificar, y no solo en la escritura. Un saludo.
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...shhh... no digo más...
un abrazo!
Siempre pensé lo mismo, Dios, Mahoma, Alá, Javhé, La masonería, quien vosotros querais .... nos ha dado dos orejas y una boca... no será para escuchar el doble de lo que hablamos ??? vamos digo yo....
Javier, creo que has sabido provocar a la gente, y no precisamente has provocado el silencio sino lo contrario.
Como señala el anónimo todo en su justa medida.
Muchas veces me quejo del que poco habla. Me repatea la poca comunicación que hay con algunas personas y si además ponen cara de póker ya dudas de si están escuchando o hace rato que desconectaron.
Y tú no hablas demasiado... también hay quién no contesta las preguntas... que vergüenza je je.
Besos.
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