martes, noviembre 13, 2007

ULTRA CANSANCIO

Hoy he tenido un día muy cansado y el cuerpo me pide meterme en la cama. No sé si quedarme a ver 'Buenafuente' o directamente me meto en la cama, sin leer nada. No sé, necesito reirme un rato porque he tenido un par de días de mucha tensión y trabajo con el juicio de que se ha celebrado por el caso de Baños de la Encina. Para quien no lo sepa, un sórdido asunto de supuesta prostitución de menores hecha en plan doméstico, desde casa, con el amparo de un padre, una madre y una tía. Un caso donde la miseria lo invade todo. Mucha pobreza de espíritu y demasiadas mentiras mal construidas.

Bueno, voy a lo que voy, porque mi idea era escribir sobre otra cosa. En los últimos días hemos asistido a una especie de festival de la ultraderecha. Un muerto de 16 años, un colombiano totalmente destrozado, un congoleño más destrozado todavía puesto que se quedó tetrapléjico... ¿Qué más va a hacer falta para que se ilegalicen los partidos políticos de ultraderecha? Porque me da igual que se ensalce la memoria histórica y que se cuide el pasado y que al mismo tiempo no vigilemos el presente. Siento ultra cansancio.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Aquí los únicos partidos radicales que se ilegalizan son los del País Vasco. Quizás si en lugar de asesinar a un joven de 16 años el sujeto en cuestión hubiera quemado un autobús en Rentería alguien le aplicaría la antiterrorista.
Somos taaaaan peculiares...

Anónimo dijo...

La cosa es que mientras Batasuna no condena, los partidos de la ultraderecha sí lo hacen.

Lo curioso es que la misma izquierda que pide la NO legalización de Batasuna sí se acuerde de ilegalizar a los que han condenado estas acciones...

Sí, somos muy peculiares en este país...

Anónimo dijo...

¿De verdad han condenado esos partidos el asesinato de este joven?
¿Síiiii?
No a la ilegalización de ningún partido. La condena o no condena de un hecho o de otro entra dentro de la libertad de expresión. ¿O ilegalizamos al PP por no condenar la guerra de Irak?. Qué tontería.
Cuando nos carguemos la libertad de expresión nos habremos cargado la democracia.