REPÚBLICA SÍ. INDEPENDENCIA NO

Soberanía para los catalanes para que decidan lo que consideren oportuno sobre su futuro. Libertad de elegir, libertad de querer, libertad de anhelar. Pero desde mi punto de vista, como catalán que soy, independencia no. Es mi visión de las cosas. Nada más. Soy hijo de extremeños, un "charnego", como pasa en muchas otras familias que hay aquí en Cataluña de diferentes orígenes de España. Mi raíz no me condiciona. Podría ser independentista de corazón, sin más ni más. Pero no lo siento así. ¿Por qué? Porque no. Es como si me obligan a estar con dos mujeres a la vez, y casarme con las dos. Así de simple.

En un mundo cada vez más interdependiente, poner en medio una frontera no lo veo bien. Soy favorable a lo que dijo Macià en su momento cuando se refirió en la radio a una Federació Ibèrica. los pueblos son soberanos para elegir qué quieren ser, incluso si quieren abandonar el Estado en el que están, pero yo digo lo que siento. Y me siento español. Y catalán. Sin fisuras. Por los cuatro costados. Y sin límites.

La pregunta del Sí-Sí, Sí-No o No... me parece absurda. Todo tendría que ser más simple. ¿Sí o no? "Voleu que Catalunya sigui un Estat Independent?". Y ya está. Tenemos este domingo uno de los experimentos políticos más grotescos y chapuceros que jamás se han visto. A 72 horas de la consulta no sabemos ni cómo se va a celebrar, ni si las urnas serán de cartón, si será a través de Internet o si habrá elecciones anticipadas. Artur Mas se confirma como un cadáver político incapaz de esperar un poco más y convocar unos comicios "amb cara i ulls" (con cara y ojos). Cataluña sí, pero que decidamos los catalanes. Mi apuesta es una República Federal para España, Euskadi y Cataluña, como mínimo. Y si se me permite el guiño: ¡Claro que Podemos!