“Este Barcelona está en el camino de entrar en la leyenda como el Madrid de Di Stefano o el Milan de Sacchi”. Gran frase de Sergio Sauca, en TVE. ¿Qué camino ni qué ocho cuartos! ¡El Barça de Guardiola es leyenda desde que ganó todos los títulos en disputa en 2009! ¡Porque es el único club en la historia que ganó 6 copas en un año! ¡Porque lleva tres ligas consecutivas y dos Champions en tres temporadas! ¿Cómo no va a ser leyenda eso? Recuerdo una discusión futbolística en una narración radiofónica mía de hace años. Tenía dos comentaristas y uno concluía que “lo importante es ganar” y el otro que “lo importante es cómo se gana”. Gana la segunda opción. Gana la belleza en el juego. Se acabaron los debates sobre árbitros. Sólo fútbol, por favor.
De las dos torres de Wembley en 1992 al arco de Norman Foster en el mismo sitio en 2011 hay un mundo. Pero el espíritu de 'jogo bonito' culé de entonces, cuando Guardiola jugaba, es el mismo que el de ahora, cuando Pep es entrenador. El juego está renovado con valores mucho más altos. Elevar a Abidal a la capitanía para que recoja la Copa de Europa, tras su dura batalla contra el cáncer, son cosas que hacen escuela, cosas que necesitamos en una sociedad sin norte. Es el Barça. Estamos aquí para defender la leyenda, una leyenda que es real. Porque la hemos visto y la hemos vivido.
1 comentario:
Aun siendo simpatizante del madrid, reconozco que hay que quitarse el sombrero ante este barça, que ha demostrado tener una plantilla y un entrenador de lujo,no me estraña que digas que es leyenda, hasta este pobre merenge lo reconoce, visca el barça y viva cataluña.
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