lunes, mayo 12, 2008

EL DERECHO A CONSUMIR MIERDA

¿Es bueno que haya prensa del corazón? Sí y no. Depende cuál. La información tiene sus límites. Con eso estamos de acuerdo casi todos. La diferencia quizá es qué límites ponemos. A la mayoría de nosotros nos gusta el café, pero unos no querrán azúcar, otros echarán hasta tres cucharadas e incluso se llegará el azúcar "en forma de isla", como defendía Javier Fesser en 'El Milagro de P. Tinto'.

Desde hace unos años hasta aquí ha habido una evolución. Al principio la prensa rosa sólo informaba de la realeza y la nobleza. Así, los actores famosos no se veían como material para las revistas porque eran un mal ejemplo. Supuestamente su vida era libertina y sin arreglo a la moral de entonces, e incluso no se les dejaba pisar determinados hoteles. Pero poco a poco esos actores fueron motivo de cotilleo... hasta penetrar cómodamente en la prensa rosa.

Ahora la cosa se ha desmadrado. Triunfa la furcia que se ha acostado con determinado famoso. Si antes tu mérito era ser rey o noble, posteriormente hacer una buena película, o por ejemplo escribir una buena obra de teatro, ahora tu mérito es haberte acostado con el que hizo esa película y, lo que es peor, ser la ex pareja de la ex pareja de la ex pareja de aquel que tiene algún mérito profesional. Ahora el famoso ya no necesita hacer algo meritorio en la vida. Su profesión es esa. Simplemente famoso.

En los últimos años ha habido una irrupción fortísima de la información del corazón en televisión. Es más, ese tipo de programas casi monopolizan los canales de este país. No es ni bueno ni malo. Está ahí. Todos tenemos derecho a ver ese tipo de programas y también a dedicar nuestro tiempo a algo más edificante. Lo último ha sido la iniciativa que ha tomado la hermana de Letizia Ortíz, la hermana de una periodista.

Telma Ortíz se ha ido al juzgado para pedir algo que no tendría precedentes en España: que los periodistas "se abstengan de captar, publicar, distribuir, difundir, emitir o reproducir imágenes o instantáneas suyas o de su pareja". Excepto, se añade, cuando participen en actos oficiales como familia de los príncipes de Asturias. Mira tú qué bien. Así de fácil. Todo esto pasa por la persecución mediática a la que se vio sometida durante su embarazo y posterior nacimiento de su hija.

¿Tengo yo derecho a perseguir a alguien? Sí. ¿Tengo derecho a meterme en su casa? No. ¿Tengo derecho a fotografiar a un menor? Nunca. Si estoy en la calle, ¿puedo tomar fotos? Sí. Si estoy en un lugar privado, ¿puedo captar imágenes? No. Ese sería un buen límite. Sobre la prensa o programas del corazón hay mucha hipocresía. Todo el mundo los critica pero todo el mundo los ve. Yo quizá voy un poco contra corriente porque no los critico pero tampoco los veo porque considero que mi tiempo se puede invertir en cosas bastante mejores. De momento, dejo el link de una web que se llama http://www.nosgustalaprensarosa.com/, una especie de asociación que defiende el derecho a consumir basura si tú consideras que es lo mejor que puedes hacer. Sí, amigos. Si quieres, también puedes consumir mierda. No pasa nada.

ULTIMA HORA

Me acabo de enterar de que la web y la Asociación Nacional de Telespectadores Independientes por una Televisión Española Libre de Manipulaciones y Ataduras (curiosamente 'Antitelma') fue creada por los guionistas del espacio 'Sé lo que hicisteis' de La Sexta. Incluso el hombre que aparecía como portavoz era un actor. Así lo reconoce la propia cadena de televisión. He picado, lo admito. Pero no sólo yo: todos los medios.

11 comentarios:

Sick dijo...

Estoy a favor de la denuncia de Telma Ortiz, siempre y cuando no haya sido ella la causante de dicha persecución. Con esto quiero decir que no haya vendido alguna exclusiva a alguna revista o television y se haya lucrado de ello.
Si un personaje como Ana Obregón solicitara lo mismo a un juez, la mandaría a freir esparragos. Ni mas ni menos. En fin, tienes mucha razón, la gente no hace más que criticar a este tipo de programas y la mayoria de ellos son fieles seguidores. Bendita hipocresia.

Un saludo!!

Anónimo dijo...

que pasa que si alguien vende algo de su vida ya está condenado a ello hasta la eternidad. Muy bonito, muy democratico, muy fraternal ....... así da gusto menudos comunistas de pacotilla que sois...

Anónimo dijo...

Dos cosas:

1.- Cada uno es libre de ver la mierda que quiera por la tele. Incluso se puede apagar si no te convence nada. Aunque parezca mentira, la tele se puede apagar.

2.- Si alguien vende algo de su vida, no debería estar condenado hasta la eternidad, pero en la práctica es más o menos así. Así que, sabiendo como va el tema, es mejor pensarse las cosas antes de hacerlas.

Sick dijo...

Lo que no se puede hacer es aprovechar del tirón cuando a uno le apetece y luego cuando te sientes acosado realizar una denuncia. Según mi parecer pierdes el derecho a ello. La moral se tiene o no se tiene. Y insisto, personajes del calibre de Ana Obregón no merecen ser respaldados por un juez ante un tema de persecución periodistica. Que traguen con lo que han cosechado.

Un saludo!

Anónimo dijo...

Estoy de acuerdo en parte.

Pongamos un ejemplo extremo:

Si una prostituta vende su cuerpo, eso no quiere decir que cualquiera que se encuentre por la calle tenga derecho a tocarle una teta, ¿no?

Anónimo dijo...

que va, la que es puta lo es para toda la vida. Si un personaje de estos que ni trabajan ni hacen nada y tienen familia etc etc tiene una necesidad urgente de dinero y vende una exclusiva ... pues nada para toda la vida ya.

Anónimo dijo...

Bueno, pues si está tan claro que es para toda la vida... ¿por qué se meten en el mundillo rosa? Una de dos, o no saben dónde se meten, o creen que ellos/ellas van a ser la excepción. Pues se equivocan. No digo que esté bien, pero hay que tener un poco de vista, cojones. No creo que nadie se sorprenda por el hecho de ser perseguido por una nube de paparazi una vez que ha decidido contar en directo sus noches locas con tal o cual famosete. Es lo que hay y todo tiene un precio. Para bien o para mal.

Sick dijo...

Anónimo eres ella, verdad? Eres la Obregón! :O

Anónimo dijo...

Jejejeje...

Al Kaffir dijo...

Quiza desde fuera desconocemos el mundillo de la prensa rosa. Es un verdadero pacto faustino. No vendes tu alma pero si tu dignidad e intimidad, ¡y ay de ti como lo intentes romper!
Todo ese negocio lo dirigen una serie de personas que son las que deciden que es lo "in" o lo suficientemente morboso para vender cierta cantidad de revistas. Los que estan dispuestos a pasar por el aro buscando su cuarto de hora de fama es cosa suya, pero que luego no vengan quejandose de que le acosan, viene en el contrato. Si es el caso de que no se ha vendido entonces no tienen ningún derecho.

Anónimo dijo...

Un saludo para Blog Lunaro. Pablo (Aitor)