LA MALENI EN SU MEJOR MOMENTO

“Me cuesta aprenderme las cosas de memoria”. “Tengo la cabeza que tengo y las posibilidades que tengo”. Pues menos mal que tienes poca memoria porque las firmas de cargos de tu confianza para autorizar gastos superlativos en tu etapa en la Junta han podido generar el caso los EREs falsos, una de las mayores corruptelas de la historia de estos años de democracia, comparable a los GAL, el caso de Juan Guerra, el de Millet o Bartolomé Muñoz, las locuras de Marbella, del ‘Pocero’, Fabra…

Pues sí que ha habido dinero tirado a la basura ahora que me pongo a recordar. Pero estamos en lo que estamos y ha habido mucho nuevo rico y sindicalista “de clase” que se ha “desclasado” un pelín de sus compañeros y supuestamente se ha llenado los bolsillos con falsos ERE. ¿Y quién les ha permitido lo que han hecho, si es que lo han hecho? ¿Quién ha dado la conformidad?

Pues bien, esta mañana la ya célebre, altiva y glamurosa jueza Mercedes Alaya, que está haciendo un trabajo admirable para destapar el caso de los falsos ERE, la ha interrogado. Espero que la ex ministra de Fomento y ex consejera de Economía de la Junta de Andalucía, que ahora es vicepresidenta del Banco Europeo de Inversiones, no le haya respondido frases tan gloriosas como “ahora crucemos los dedos”, “hay determinadas cuestiones, que aun conociéndolas, no las conozco” o “el aeropuerto de Barajas es ‘mu’ grande”.

La Maleni dice: “Cuido tanto el hablar que hablo peor, porque si hablara como siempre he hablado y no quisiera hablar despacito para no saltarme determinadas terminaciones, que me las sigo saltando, y demás, me costaría menos porque pienso más rápido que estoy hablando y entonces se me va el hilo de la intervención”.

“Si la borrasca cambió de forma impredecible, no la pueden predecir, y si no la predicen quienes la tienen que predecir, ¿cómo quieren ustedes que lo vayamos a predecir aquellos que estamos esperando la predicción?”. Bien, Maleni, ¿y cómo quieres tú que yo me entere con quién has empatado para pasar por tantos cargos y hacerlo todo tan mal? ¡24.000 euros al mes es lo que cobra esta prestidigitadora de las palabras entre salario y dietas!