¿QUIÉN PAGA EL TRAJE NUEVO AL EMPERADOR?

Hace pocos días me refería al cuento de Andersen 'El traje nuevo del emperador', donde un grupo de estafadores engañaban a un rey estúpido fabricándole un ostentoso traje que realmente no existía... hasta que un día se puso a desfilar y un niño que estaba entre la gente dijo "¡el rey va desnudo!" y el pueblo llano se empezó a reír a mandíbula batiente.

Durante estos días, el emperador nos quiere explicar de dónde sale el dinero para comprar su traje y encima nos quiere hacer creer que va vestido. Parece ser que el rey cobra 292.752 euros brutos, de los que 140.519 son salario directo y 152.233 gastos de representación. Fantástico. 30 años después ha hecho falta un escándalo supuestamente provocado por su yerno, ahora imputado, para que el rey nos explique que no va desnudo.

Va bien vestido por una fortuna de 1.790 millones de euros, acreditada por la revista Forbes, que supongo que irá juntando de degeneración en degeneración. Y no estaría de más recordar que hoy nadie sabe cuánto recibe la Corona del ministerio del Interior y de Defensa por su seguridad personal y cuánto les llega de Asuntos Exteriores o de Iberia directamente cuando toca montar un viajecito y cuánto puede pagar este hombre y su familia en hipotecas, luz, agua, teléfono, etc.

Aunque el tema de fondo no es qué cantidad nos cuesta la Corona de España, ni cómo se desglosa en el presupuesto, ni tan siquiera si la nuestra es una monarquía barata o cara. Tampoco me interesa el caso Urdangarín. Lo único que me interesa es saber por qué, en pleno siglo XXI, el jefe del Estado Español no puede ser elegido por el pueblo. Y es que muchos todavía piensan que el rey va vestido.