sábado, febrero 04, 2006

MAHOMA NO ES UN TERRORISTA


¿Qué hacer cuando te llaman blasfemo? ¿Te callas o sigues tu línea? ¿Es negociable la libertad de expresión? ¿Cuál es el límite? ¿Es grave hacer un chiste de Mahoma con explosivos en la cabeza? ¿Y si dibujamos a Jesús lanzando bombas sobre Bagdad o matando musulmanes? Ambas cosas son una falta de respeto.

No se puede limitar la libertad de expresión de nadie, y periódicos como 'Die Welt' o 'El Periódico' hacen muy bien en publicar el chiste del diario danés 'Jyllands-Posten', pero identificar a Mahoma con el terrorismo es meter a todos los musulmanes en el mismo saco, y eso no es justo... ni como chiste. La reacción islámica es desproporcionada. El integrismo está ahí pero la mayoría de los que miran a la Meca no son radicales. Busquemos un equilibrio.

La libertad no te la da nadie, la tomas. Tú haces uso de ella cuando quieres y como quieres y el único límite es el respeto a que el otro también pueda ejercer su libertad. Ni el otro es nadie para impedirte nada ni tú eres nadie para limitar la libertad del otro. Cada uno es responsable de sus actos y no debe haber moralizadores que pongan puertas al campo... pero el chiste no tiene ninguna gracia.

1 comentario:

Bibliotecario publico dijo...

Por qué deben los musulmanes "aprender lecciones de democracia occidental"... ???
Hacer juicios particulares a toda una cultura a partir de meras suposiciones desfondadas de que nosotros sí tenemos la razón y la verdad; que nosotros los occidentales ya no vivimos en el oscurantismo “producido por la fe”; y que por eso, nosotros los occidentales, tenemos derecho (porque podemos) provocar a los demás pueblos tildándolos de retrasados o de inferiores, de salvajes o de "terroristas" a través de la manipulación masiva de la idea que se tenga de una cultura. Tantas películas como ^El exorcista^ que exponen a lo perverso como venido de Oriente Medio o África. (Irak para el caso de El exorcista)... Y lo más grave es que ante actitudes tan berrinchudas como estas haya todavía quienes aseguren que los gobiernos del mundo han adquirido conciencia sobre la protección de la diversidad cultural....
Tal pareciera que carecemos de la conciencia del otro, del respeto simple y llanamente, sin atributos de nada... sencillamente respeto. Este libertinaje de la conciencia "liberal" (asquerosamente elitista) de occidente, muy probablemente no nos lleve a una verdadera relación con los otros, porque pareciera que ni siquiera estamos dispuestos a intentar desarrollar la capacidad de aceptar el derecho a la existencia de lo otro, de lo ajeno, de lo que no es como nosotros.
La publicación de las caricaturas de Mahoma terrorista nada tienen que ver con libertad de prensa... Porque la libertad de expresión periodística, en tanto que son reportes periódicos de un suceso y no la exposición de verdades fundamentales, debe desarrollarse en la crítica hacia los particulares. Cuando empezamos a agredir a las máximas representaciones culturales de un pueblo (en este caso Mahoma) entonces estamos tocando el terreno de lo propio (natural) de un pueblo en particular, e insinuamos que desconocemos aquella naturaleza como verdadera y de pasada que lo verdadero es lo nuestro, lo occidental, lo racional, lo avanzado, lo progresista, lo civilizado...
Pero entonces si nos creemos tan sapientes como para poner en duda la cosmogonía de todo un pueblo, entonces qué hacemos en el periodismo, pongámonos a estudiar, a someter a métodos dialécticos nuestra mentada libertad de expresión particular y vamos viendo cuántas pruebas logra pasar. ¿A qué corresponde ese comportamiento de la publicación de caricaturas que laceran la dignidad de otros pueblos?... ¿Responden a una tesis bien desarrollada a cerca de cómo esa cultura de terroristas esta inspirada o responde a designios divinos, a una teología igualmente terrorista?. ¿O responde más bien a un acto meramente sensibilista y de repudio irracional hacia un pueblo...?
Es una verdadera pena que en una labor tan noble como el periodismo haya quienes se presten a fomentar la guerra de ideologías. Periodistas tan irresponsables que se dejan llevar por instintos meramente pasionales de repudio hacia otras culturas. En dónde empiezan y en dónde terminan los derechos... y no se trata de legislar, se trata de un comportamiento ético que va más allá de los derechos legislables cualesquiera que sean.
Quien esto escribe es una escéptica teísta o agnóstica (comúnmente llamados “ateos gracias a Dios”), sin embargo considero que el respeto (simplemente el respeto) es lo único que tenemos para sobrevivir como humanos. Pues incluso no existen “ateos puros”, pues así como no hay forma de demostrar la existencia de Dios, tampoco hay forma de probar su inexistencia, por lo tanto ateos y teístas somos “creyentes” por igual (de los que "creen" que si existe, y de los que "creen" que no existe), de tal suerte que estando todos en igualdad de condiciones no veo la razón de actos tan irreflexivos de los que ya hemos hablado.

saludos desde el tercer mundo

Erika Charles.
México